La Comunicación No Verbal de Unai Emery es digna de estudio.
Estamos ante un entrenador con una Marca Personal bastante potente que ha ido creciendo en su liderazgo paso a paso y ahora entrena al PSG que le ha puesto a los mandos de un equipo hecho a base de millones.
¿Qué nos dice la comunicación no verbal de Unai?
Unai el práctico.
Después de estudiar sus temperamentos podemos decir que estamos ante un tipo que busca el equilibrio entre su parte emocional y su parte más práctica y que le ha llevado a conseguir importantes objetivos siendo un entrenador joven y con margen para la mejora. Lo demostró en equipos como el Lorca, Almería, Valencia y Sevilla .
Su visión del fútbol se orienta a los resultados y a la ambición y para ello se estruja literalmente la cabeza.
¿Y cómo se ve eso a nivel de su comunicación no verbal?
A través de la información que nos da estudiar su temperamento. El temperamento que define a Unai Emery es el colérico, que le permite estar siempre con los ojos clavados en cómo mejorar para lograr resultados. Poniendo atención a su comunicación no verbal lo veremos que su pisada o de sus gestos están llenos de fuerza y rapidez.
Sus piernas se notan que están musculadas, fruto de una carrera típica de futbolista y tiende a pisar también fuerte pero supinando, caminando con las piernas arqueadas, símbolo de gran confianza en sí mismo.
Le interesan las personas.
Pero Unai también presenta gran cantidad de señales que hacen pensar que su temperamento secundario es el sanguíneo, más orientado a las personas.
Tener este temperamento tan desarrollado le ha permitido establecer grandes relaciones y fuertes vínculos con la gente que trabaja con él. Y fruto de ese trabajo han llegado los resultados que ha tenido.
Sus Gestos.
Mirar a Emery durante un partido es ver un festival de movimientos de manos, de piernas y de gestos faciales inclasificables, donde la emoción, la claridad, la razón y la acción entran en conflicto, pero que dicen mucho de su personalidad.
De hecho es de valorar la gran disposición que tiene al aprendizaje y el trabajo tan grande que hace para integrar lo emocional en un método tan práctico y con tantos datos.
Muchas veces sus movimientos se combinan , otras desbordan y dejan de ser coherentes. Se observan diferencias en sus gestos según esté dirigiendo un partido o dando una rueda de prensa.
Quizás ahí tiene el reto de los próximos años. Sumar a su capacidad de cumplir objetivos el ir mejorando la gestión emocional e ir equilibrando sus temperamentos flemáticos y melancólicos.
¿Unai vs Guardiola?
Si miras las comunicación no verbal de Ancelotti o Guardiola, a Unai le cuesta sacar su lado más tranquilo durante los partidos. Eso sí, no se corta en pedir tranquilidad a los suyos aunque el sea el primero que no la transmita con su cuerpo.
Esta tranquilidad es la que aporta el temperamento flemático e incluso el melancólico, de los que el técnico vasco no presenta ninguna señal que le asocien a ellos. Algo que sí tienen Guardiola o Zidane.
Y aquí es donde está el verdadero reto de Emery para los próximos años. Una vez equilibre estos temperamentos se convertirá en el entrenador total que tendrá visión de objetivos, solidez relacional y más amplitud estratégica.
Existen muy pocas que sepan combinar practicidad, relaciones y estrategia.
Unai el incomprendido
Una parte del Estudio de Comunicación No Verbal es el de PNL. Y sobre Unai hay 2 claves: Es auditivo y kinestesisco.
Unai Emery muestra una fuerte tendencia al uso del mapa auditivo, sobre todo en ruedas de prensa o cuando habla en público. Esto lo ves en los ojos que los mueve de lado a lado como si estuviera leyendo.
El problema de esto es que cuando las personas no usan su mismo mapa se desconectan de lo que dice y el entendimiento entre ellos se complica.
Otros ítems que pueden identificarlo como auditivo son:
Unai con la Prensa.
Durante sus intervenciones o respuestas a periodistas, las cuales son bastante largas, puntualmente mira a la persona como con intención de que su interlocutor no se desconecte.
Usa la kinestesia en menor medida a la hora de interactuar con el otro para intentar convencerle de sus argumentos o dejarlo claro. En muchos vídeos se acaricia las manos mientras habla.
Con Unai siempre hay debate, pero es innegable que si la empresa busca lograr objetivos importantes, el vasco tiene argumentos más que suficientes para ser el candidato perfecto. Al Sevilla lo llenó de plata. Ahora se enfrenta al reto de dirigir un equipo multimillonario donde la presión por los resultados se han multiplicado. Aún tiene margen para mejorar y sobre todo ganas para hacerlo.